Se puede decir que Francisco Gabilondo Soler tuvo dos grandes pasiones: la música y la astronomía.

 

La astronomía era para él una ciencia de escritorio, con lápiz y papel. Le interesaba particularmente la parte matemática de la astronomía, la parte que busca encontrar las fórmulas matemáticas en los movimientos de los astros.

 

Disfrutaba al máximo las reuniones con sus amigos astrónomos, grupo que nombró“Los Astrolocos”, apelativo con el que él mismo se designaba

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Gabilondo Soler aseguraba que ver una astro a través de un telescopio, era todo un espectáculo.